Esta ocupación es un mecanismo de defensa para evitar la colocación permanente de puestos del comercio informal permitida y hasta promovida por las autoridades distritales.
Se evita el taponamiento de las entradas a los locales de comercio formal y a centros comerciales. La competencia desleal.
La manipulada apropiación como derecho del espacio público .
Si la informalidad no invadiera los andenes no existiría este fenómeno.
La lógica facilista institucional del distrito para mostrar resultados es actuar sólo contra los comerciantes formales; salen de cacería al zoológico. Es pelea con “burro amarrao”.
Los formales no ejercemos la violencia, no hacemos asonadas ni bloqueos. Cumplimos con nuestras obligaciones tributarias y demás, propias de nuestra profesión.
Es enfrentar a las asociaciones que exigen el derecho al espacio con el comerciante formal. Sin costo político.
Nuestro ideal es un sector seguro de comercio organizado, a la altura de nuestro San Victorino.
Columna de Opinión
MANUEL DE JESUS CASTAÑEDA
LA REACCIÓN PRENSA
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