En la oscura y lluviosa noche del 12 de diciembre de 1999, el Pacífico colombiano fue testigo de uno de los actos más desgarradores y heroicos en la historia de nuestra Armada Nacional. Bajo un aguacero implacable, la Base Militar situada en un cerro estratégico del municipio de Juradó, en el litoral Pacífico y cerca de la frontera con Panamá, fue atacada brutalmente por un contingente de aproximadamente 600 narcoterroristas de las FARC.
Según las estimaciones del señor Almirante Sergio García, Comandante de nuestra institución en aquel entonces. Aislados, sin posibilidad de apoyo inmediato y enfrentando una situación similar a la vivida en El Billar y Las Delicias, los héroes de la Infantería de Marina resistieron hasta el último aliento.
En este acto de sacrificio supremo, 28 hombres ofrecieron su vida en el altar de la Patria: un oficial, tres suboficiales y 24 infantes de marina, cuya memoria seguirá viva en el corazón de Colombia. Otros 31 valientes resultaron heridos en combate y el Teniente Ledesma fue llevado cautivo, solo para ser vilmente asesinado por sus captores en el 2004.
La tragedia no terminó allí; las difíciles condiciones meteorológicas y las limitaciones en la disponibilidad de helicópteros retrasaron más de 18 horas el desembarco de refuerzos de la Fuerza de Despliegue Rápido (FUDRA), dejando a nuestros hombres en una lucha desesperada y desigual.
Este hecho, teñido de dolor y heroísmo, es un recordatorio imborrable del sacrificio que, por más de dos siglos, nuestros soldados de tierra, mar y aire han ofrendado por la Patria. Con su sangre han escrito epopeyas vibrantes, hiladas con un amor profundo por Colombia, su gente y el sueño eterno de construir una nación «respetada y libre».
Hoy, su legado se alza como un faro que ilumina nuestro camino y su entrega se convierte en un ejemplo eterno para las generaciones presentes y futuras. Nunca podremos olvidar a quienes lo entregaron Que su sacrificio no sea en vano. Descansen en Paz.
PAZ EN SUS TUMBAS, QUE BRILLE POR CADA UNO DE ELLOS UNA LUZ EN EL FIRMAMENTO. DESCANSEN EN PAZ HÉROES DE COLOMBIA.
Por Silverio Jose Herrera Caraballo
Abogado, comunicador, asesor, consultor y analista en seguridad convivencia ciudadana y orden público,
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